“Llegando a puerto para empezar desde Cero”
-Tesina Grado VII. ”Adepto Liberado”-
(Wolverine, Guadalajara, Jalisco-México)
Me ha parecido a mí, al menos ésta es mi conclusión, que la Primera Orden, con sus grados de Celador, Teórico, Práctico y Filósofo, son meros escalones preparatorios para el aspirante a Rosacruz.
Ésta Segunda Orden, creo, es donde realmente comenzaría la Escuela Rosacruz. De hecho, teóricamente, un Adepto Menor ya sería un Hermano Rosacruz de pleno derecho; es decir, me parece entender que el Adepto Menor sería un Grado equivalente al de Aprendiz en la Masonería, el de Adepto Mayor se corresponderá con el Grado de Compañero y éste que acabo de terminar, ya no me queda casi duda, sería el equivalente al de Maestro en el Oficio de albañilería.
Luego, si nadie me reprende y demuestra lo contrario; el Grado de Adepto Liberado sería el tercer Grado de la Rosacruz de Oro del Antiguo Sistema. Aunque parezca extraño, creo que los grados de la Primera Orden vendrían a corresponderse, el Primero con la Solicitud de Membresía y su correspondiente Cooptación por parte de la Orden. El Segundo sería la Primera Aplomación, el Tercero, la Segunda Aplomación y el Cuarto una Tercera y última Aplomación, antes de ser aceptado a la iniciación en la Segunda Orden que, como hemos dicho, sería la verdadera Escuela de la Rosacruz de Oro. Así el Adepto Menor podría llamarse también: Frater Aprendiz de la Rosacruz de Oro; el Adepto Mayor: Frater Compañero de la Rosacruz de Oro y el Adepto Liberado como Frater Maestro de la Rosacruz de Oro.
Bien, a la hora de realizar ésta Tesina, soy plenamente consciente de que el Hermano Aralba R+C, no lo planteó, esto de los Grados, como un Sistema Iniciático en diversos escalones; sino que como viene diciendo, cada poco, se trataría de un mero homenaje a la “Rosacruz de Oro del Antiguo Sistema de Alemania en el Siglo XVIII”; de hecho, tan consciente soy de ello que, efectivamente, durante todo mi tiempo de estudio no he visto una frontera temática entre los diferentes grados; es decir que, al contrario de lo que se pudiera pensar, los grados más bajos, para ser exacto, las aulas más bajas, no ofrecen información de menor calidad y enjundia que las aulas más elevadas.
Determino, con ésto. Y espero que el Frater Aralba no se me ofenda: que la Información contenida en el “Colegio Invisible de la Rosacruz” está siendo introducida sin seguir un criterio pedagógico al uso; sino, es mi humilde apreciación, según sale de la Cabeza de su Autor o, como vendría a decir Aralba, de Cristo su Maestro Interno.
Llegado a éste punto, me queda muy claro que para absorber, al completo, las enseñanzas rosacruces expuestas en éste lugar, hay que comenzar desde la Primera Lección del Grado Primero para acabar con la Última Lección del Grado Noveno; eso, si los aspirantes a Hermanos de la Rosacruz no quieren perder valiosa información por el Camino.
Me ha parecido que, dentro de ésta Orden de Tres grados, el Grado de Adepto Mayor es el más importante porque se dedica a la curación de los enfermos; de hecho, al no ver qué Aralba haya completado dicho Grado; es decir que queda abierto hacia el futuro, es como que es el último Grado y en el que hay que seguir aprendiendo, cada día, un poquito más. Éste Séptimo, ya lo indica su nombre, Adepto Liberado, como que encumbra al Hermano Rosacruz para, ya, estando Licenciado, comenzar a trabajar en el beneficio de sus hermanos y de la totalidad de la Humanidad.
Con éste escalón, hay que recordar que todavía queda una Tercera Orden, constituida por los últimos dos grados, el Octavo y el Noveno, el Trabajo de formación Rosacruz quedaría completado; si es que eso es posible, que creo que no. Y el Servicio o Trabajo en favor de la gente, comenzado desde los primeros grados, ahora ya sería íntegramente efectivo; es como decir, ahora, después de tanto tiempo de formación, lo que toca es Trabajar. En el Grado de Adepto Menor, el aspirante a Rosacruz dejó de ser un Alumno o Rstudiante, en sentido convencional, para convertirse en un Servidor, Adepto, de la Rosacruz. Ahora, habiendo alcanzado el Grado de Adepto Liberado, se acaba una Etapa para comenzar una tercera de Ministerio que debe de comenzar desde cero. Ahora el Adepto se prepararía para, en la Tercera Orden, convertirse en un Hermano Mayor de la Rosacruz, en un verdadero Sacerdote y un verdadero Mago.
Pero, Ojo, quiero recordar a quien tenga la fortuna o mala fortuna de leer ésto, que los grados del “Colegio Invisible de la Rosacruz” son simbólicos; es decir, se trata de aulas de Estudio al que su Arquitecto, Aralba, ha denominado de tal modo como un homenaje al trabajo que hiciera la Masonería Alemana, en el Siglo XVIII, para preservar el Conocimiento de la Reforma del Mundo que representaba la Fraternidad de la Rosacruz del Siglo XVII. Esto es importante porque no vaya alguno a creerse que por haber llegado hasta aquí, uno ya es un verdadero Adepto de la Rosacruz. Yo mismo soy consciente de ello y me consta que todavía me queda mucho trecho, en el Camino, para alcanzar el adeptado efectivo de la Rosacruz.
En L.’.V.’.X.’.
Que las Rosas florezcan en vuestra Cruz
Frater Wolverine RC, a 04 de abril de 2025 (Guadalajara, Jalisco-México)